Al paso de los años todos los sistemas del cuerpo se van deteriorando ya que son menos eficientes y más tardías sus funciones, por esta razón es muy importante tener una buena alimentación en la tercera edad para ayudar el buen funcionamiento de estos.
El envejecimiento es un proceso totalmente natural por el cual pasan todas las personas, en el cual se presentan cambios que para muchas personas son más drásticos que para otros y todo esto se debe principalmente de cómo se alimentó y se ejercitó a lo largo de su vida.
Estos cambios principalmente se encuentran en la disminución de masa muscular, perdida del movimiento por las articulaciones y reducción de la densidad ósea. Esto puede ser contralado por una buena alimentación en esta dura etapa, sin embargo todas estas complicaciones pueden ser prevenidas antes de llegar a la tercera edad con una alimentación sana y la práctica del deporte.
Normalmente un adulto mayor tiene problemas digestivos que comúnmente se deben a la baja producción de saliva, la baja capacidad de absorción de nutrientes, dificultad de masticar y digerir que causan el estreñimiento. Por otro lado la hipertensión y la diabetes son serios problemas de alimentación que pueden ser contraladas con lo siguiente:
- Disminución de grasas: en la tercera edad el metabolismo de las grasas es más lento haciendo que la persona se engorde con facilidad.
- Aumentar el consumo de fibra: fortalece los organismos
- Consumir alimentos blandos: por el desgaste de la dentadura como purés, tortillas, pescados
- Aumentar el consumo de carnes blancas: poseen menos grasas y son más digestibles como el pollo, pavo, pescados.
- Aumentar el consumo de lácteos: fortalecen los huesos y previene la osteoporosis como quesos, leche, yogur
Una dieta equilibrada acompañado de la práctica de actividad física es la base de una vida saludable y duradera, previene y cura todas las enfermedades alimentándote bien.